- Alargan la vida útil de la instalación/del equipo y
reducen las averías - Reducen los gastos de mantenimiento y
reparaciones - Aumentan la disponibilidad de la instalación
- Reducen considerablemente el consumo de
energía en aplicaciones con temperaturas extremas - Aumentan la productividad
- Reducen el consumo de combustible en equipos de
construcción gracias a la mejora del arranque en
frío