- Alta estabilidad química y térmica.
- Buena estabilidad a la oxidación.
- Elevado poder antiherrumbre.
- Gran rapidez de desaireación.
- Excelente capacidad antiespumante.
- Excepcional control de formación de depósitos y lodos.
- Su elevado rendimiento permite un mayor periodo de vida útil, consiguiendo intervalos de cambio más largos de las cargas de aceite, y reduciendo con ello los costes por paradas de mantenimiento.